Historias de una mente fragmentada

Quiero amarte, quiero romperme en tu aliento y resucitar en tu mirada. Quiero portarme mal, hacer de cuenta que no existo, que soy una mujer de polvo que el viento me lleva, me lleva a perderme por los cuerpos, por tu cuerpo, por su cuerpo. Quiero detestarte, aniquilarte, como en las películas , como en nuestra película . Quiero pintarte, en marcarte, mancharme con las pinturas de tus mentiras, con las razones de tus vicios, con las caricias de las manos que hoy te han atrapado, que te han perjudicado, que te han enloquecido, que te han confundido . Quiero oscurecerme, quiero ser de noche y no de día, quiero perseguirte, doblarme, humillarme , desaparecer, encontrarte combinarme con el alma, con su alma. Quiero extinguirme en tu cibermúsica , en tú ciberconferencias , en tus ciberllamadas . Pero lo que más quiero y no puedo, es ser de carne y hueso y no un avatar manejado por tus manos.

Ojala todos fuéramos de papel para poder moldearte a mi estilo y ser soberbia hasta el cansancio hasta que las letras se esparzan gemelas por ambos lados y los puntos y los peros no se coman la historia. Repetir anécdotas hasta el cansancio y limpiarme las lágrimas con las palabras minúsculas, corregir las faltas con manos prestadas, exhibir las mayúsculas con tus nombres. Reescribirte a mi antojo, destruirte para de nuevo crearte, borrar las sugerencias. Exhibir la bondad de tu creación para de nuevo perderme entre tu alfabeto y nunca imprimirte. Ojala todos fuéramos de papel para creer en la vunerabilidad de nuestra existencia y no perdernos en argumentos.