Expulsión por telepantalla de la detección

Siempre busco escribir desde el inconsciente, pero hoy me he planteado hacerlo muy consciente.


Entonces, mientras desviaba la atención de las luces gemelas de unos abanicos que volaban de forma perpetua. Me percate que la nave se había vuelto más grande  y oscura, pero que algo en su interior todavía seguía vivo y eran los seres que siempre sostenian dos antenas para colocarme una telepantalla del siglo pasado, donde señalaba el excesivo tráfico de visiones exteriores que cada individuo propiciaba, fue allí cuando me dijeron: Escucha las radiación. Esas radiaciones indicaban a alguien hablando del cancer en el ovario y después me tocaron los hombros.  ¿Es aquella una expresión? pero, yo solo vivo con unos residentes indesceables ni siquiera alcanzo a decir la palabra cancer.¿ No esperaran a que me vaya o sí?Juro que yo no los invité, ellos se instalaron de alguna forma cuando me encontraba inventando las galaxias destruidas.

Entonces, ¿Me voy a curar? ¿Voy a vivir para volar? ¿Podre conocer al mundo y el mundo? ¿Todavía puedo soñar sin cerrar los ojos? Y ella me respondió: la detección a tiempo te ha salvado, ahora solo tienes que matar a esos pequeños e  insignificantes residentes que no te harán daño a menos que lo permitas. El tratamiento es fácil y de 6 meses, después te haremos un estudio. Entonces, soy libre puedo regresar a mi nave, pero antes viajare a través de los ojos y me quedare un tiempo para luchar con mi cuerpo derretido. Otra vez estos mareos y ganas de vomitar, asaltar un bote inmenso.


La detección a tiempo siempre da una oportunidad de vida que vale la pena. Una buena calidad de vida es el derecho de todos los seres humanos y nunca será normal sentirse mal ni pasar un mal rato porque la vida es más corta de lo que imaginamos.

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